Existen alrededor de 300.000 normativas de tamaño de papel. El sistema de clasificación de tamaños de papel DIN A a veces lleva a confusión y puede hacer que te equivoques e imprimas tus documentos a un tamaño que no es adecuado. En este articulo queremos despejar estas dudas y contarte un poco más sobre el sistema de medidas de papel DIN A.
¿Qué significa DIN?
DIN es un acrónimo que significa Deutches Institut für Normung. Y para el que no entiende el alemán, significa Instituto Alemán de Normalización. Esta entidad surgió en el 1917 para clasificar los tamaños del papel y normalizar las técnicas. También surgió como una manera de perfeccionar y mejorar las técnicas que hacen uso de papel.
Pero el origen de esta normativa se estableció gracias al ingeniero Walter Porstmann con la finalidad de establecer los formatos de papel para optimizar su uso, evitar todo desperdicio y aprovechar al máximo este material. LA serie A es la que todos conocemos pero existe también otras plantillas como la B, C, D y E y todas van enumeradas.
Las medidas DIN A
Las medidas DIN A que todos conocemos parten de una plantilla a partir de la cual se calculan las proporciones de los demás tamaños. Las enumeraciones indican la cantidad de cortes por la mitad alargada de la hoja original. Es decir, cuando estamos ante una hoja de tamaño A0 y la cortamos por la mitad de su lado más largo, conseguimos la A1. Si la A1 se corta por la mitad, se conseguirá un papel en formato A2 y así sucesivamente. La hoja con formato principal (A0) mide 841×1189 mm. A partir de ahí, se pueden calcular las medidas de los demás formatos.
¿Qué usos podemos darle a los diferentes tamaños?
Según el producto que queremos conseguir se aconseja determinado formato. Si por ejemplo queremos conseguir un tríptico o un díptico lo mejor es utilizar este tipo de formato A. Partimos de un A4. Pero puedes utilizar también un A5, A 6 o A7 según lo reducido que lo prefieras.
En el caso de carteles lo mejor es ampliar su tamaño utilizando un A3, un A2 o un A1 según las medidas que se necesite y donde se va a colocar el cartel. Recuerda que a meno número, más grande el tamaño del papel.
Si es para un folleto es mejor recurrir a un tamaño más pequeño pero esto depende de varios elementos: la información que se quiera incluir y como se van a repartir los folletos.