Retículas para impresión

Las retículas son un formato que estructura y equilibra la página alineando y diseñando todos elementos de la página para que todo se adapte correctamente a los diferentes tamaños de cada dispositivo. La mayoría de los diseñadores web utilizan las retículas para distribuir los elementos en una página, no obstante, no todos los diseñadores de impresión hacen uso de las retículas para ordenar sus impresiones. Hoy en Imprenta Madrid veremos qué son las retículas, que tipos hay y cómo crearlas.

Las partes de una retícula son las siguientes: columnas, medianiles, márgenes, filas y módulos. Las columnas son aquellos elementos verticales que dividen la página. Los espacios que existen entre columnas son los medianiles. El borde y el contenido de una página están separados por los márgenes (de los que ya hablamos en otro post). Las filas son las separaciones horizontales entre los contenidos de la página. Todos los bloques que se construyen a partir de las columnas verticales y las filas horizontales se denominan módulos.

¿Por qué es necesario utilizar retículas a la hora de diseñar una página para imprimir?

La ventaja principal es la rapidez a la hora de componer una página. Si todo está más ordenado y estructurado evitaremos todas las indecisiones a la hora de diseñar. Este es el caso de la composición de una revista o un reportaje. Otra ventaja de utilizar retículas es que si siempre seguimos las mismas directrices para una empresa conseguiremos una imagen corporativa mucho más consolidada.

Cuando queremos ordenar los elementos y los contenidos de una página utilizaremos las retículas jerárquicas. Según la importancia de los contenidos utilizaremos un tipo de retícula u otro. La retícula de manuscrito es la manera más simple de estructurar una página, puesto que solo tendremos una columna. Lo único que cambia en esta forma de organizar los contenidos son los márgenes. Las retículas modulares se componen de bloques de contenido.

La retícula de columna sirve para reparar el texto y es mejor utilizarlo para textos muy largos que hay que extender en una página. No obstante, según el formato y tamaño de página utilizaremos un tipo de retículas u otra. Por ejemplo, en el caso de las páginas de tamaño DIN A5 será mejor dividir las páginas en máximo 2 o 3 retículas, ya que de lo contrario, las líneas serán demasiado cortas y la lectura se verá mucho más dificultada. Lo ideal será que utilices 50-60 caracteres por línea.