Las tarjetas de visita son a menudo el primer elemento de marketing que imprimimos cuando iniciamos o nos unimos a un nuevo negocio. Con las técnicas de impresión digital de hoy en vía, cualquiera puede conseguir tarjetas de visita profesionales sin tener que tirar la casa por la ventana.
No obstante, debido al auge de la comunicación y los negocios en el plano digital muchas empresas han pasado a operar directamente en Internet. ¿Sigue siendo importante para estos negocios ofrecer tarjetas de visita? Rotundamente sí, y explicamos por qué.
¿Por qué siguen siendo importantes las tarjetas de visita?
Hay muchas razones por las que las tarjetas de visita siguen siendo una parte fundamental de tu estrategia de marketing.
- Será la primera impresión que muchos clientes potenciales tendrán de tu marca, de tu negocio y de ti mismo.
- Son extremadamente efectivas como herramientas de marketing. Una buena tarjeta de visita nunca acabará en la basura, y eso significa que sus efectos seguirán vigentes semanas o meses después de que haya sido entregada y recibida.
- Son mucho más personales que el correo electrónico o el marketing online. Un apretón de manos y el intercambio de tarjetas crea un impacto mucho mayor que cualquier correspondencia a distancia y eso es excelente para construir relaciones comerciales sólidas y duraderas.
- Muestran que eres un profesional serio en tu negocio. Si alguien solicita una tarjeta de visita y no puedes ofrecérsela, realmente causarás una impresión negativa.
- Las buenas tarjetas de visita se comparten entre contactos y colegas. Una tarjeta de visita inteligente, creativa, bien diseñada e impresa profesionalmente es una excelente manera de conseguir referencias.
- Son un elemento de marketing realmente rentable en términos económicos. Son efectivas y fáciles de producir a bajo coste en comparación con otras acciones de marketing.
¿Cómo usar de forma efectiva tus tarjetas de visita?
Las tarjetas de visita son versátiles, se pueden utilizar en cualquier lugar y puedes llevarlas a dondequiera que vayas. Te sorprenderá la cantidad de oportunidades que tendrás para repartir tarjetas en tu día a día si realmente te preocupas de hacerlo y lo adquieres como un hábito.
No hay reglas a la hora de repartir tarjetas de visita, así que usa tu imaginación. En la cuenta del restaurante en el que sueles comer, en esa feria de tu empresa en la que presentáis un nuevo servicio o en una conferencia sobre el área en el que estás especializándote a nivel profesional son sólo algunos ejemplos.